BLG

China, Cervantes, Cuenca
La catedral de Cuenca se convierte hasta el 6 de noviembre en destino obligado para los amantes del arte contemporáneo y los viajeros inquietos por descubrir una exposición única ubicada en una de las joyas del gótico español.
De Cervantes y del Quijote se ha escrito y dicho tanto (sobre todo en estos últimos años en los que se han celebrado los centenarios de la publicación de las andanzas del Caballero de la Triste Figura, y en este 2016 el de la muerte de su autor) que resulta complicado encontrar nuevos aspectos que alumbren, indaguen o muestren novedades sobre el universo cervantino.

Por eso llama poderosamente la atención el leitmotiv de La poética de la libertad, título de la exposición -en realidad tres en una- que permanecerá abierta hasta el próximo 6 de noviembre en la catedral de Santa María y San Julián de Cuenca: “Desvelar y difundir la capacidad del arte para convertirse en vehículo de la lucha por la libertad de expresión y la defensa de los derechos humanos”. Una muestra en la que Cervantes se da la mano con el artista chino Ai Weiwei y con destacados representantes del informalismo, movimiento artístico que surge a finales de los cuarenta con el lenguaje abstracto y la atracción por todo tipo de materiales como protagonistas.
Dice don Quijote: “La libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos; con ella no pueden igualarse los tesoros que encierran la tierra y el mar: por la libertad, así como por la honra, se puede y debe aventurar la vida”. Estas palabras sirven para presentar esta muestra, que tiene precisamente a la relación entre libertad y arte, o mejor, a la exigencia de la libertad a través de la manifestación artística como último objetivo.

Foto: Santiago Torralba.
Sin duda, y sin menospreciar en absoluto el valor de las otras dos muestras, el espacio del claustro catedralicio es la clave y el corazón de la exposición. Allí encontramos S.A.C.R.E.D.de Ai Weiwei. El magnetismo de uno de los grandes agitadores de conciencias y protagonistas del mundo artístico del siglo XXI se apodera del visitante al contemplar las seis grandes cajas de hierro en cuyo interior una serie de dioramas reproducen los 81 días que el artista estuvo detenido por las autoridades chinas. Aquella detención y retirada del pasaporte durante cuatro años fueron el altavoz definitivo de su obra. Estos contenedores plantean una denuncia ante la opresión y a favor de la dignidad personal y la libertad, aspectos muy presentes en la -no exenta de controversia- obra del Ai Weiwei.

Reproducción del cautiverio de Ai Weiwei. Foto: Santiago Torralba.
Otra “mirada intemporal” es la que propone Cervantes y la libertad, que “indaga, desde nuestro tiempo, en la manera en que la libertad constituye un concepto integral en la vida y en la literatura de Miguel de Cervantes, para quien sus años de cautiverio fueron definitivos a la hora de trazar, a través de la escritura, el retrato moral de su época, rompiendo todos los moldes y dando paso con el Quijote al nacimiento de la novela moderna”.
La última “mirada”, la más cercana, tiene como protagonistas a un escogido grupo del llamado informalismo español. Obras de Gustavo Torner, Antonio Saura, Fernando Zóbel, Martín Chirino, Francisco Farreras, Luis Feito y Rafael Canogar –que ya cuentan con una estrecha vinculación con Cuenca a través del cercano Museo de Arte Abstracto Español- aparecen intercaladas con fotografías de Juan Barte. Se trata de bocetos, ideas y procesos intermedios de creación de estos artistas que “lucharon, consiguiéndolo, por romper el cautiverio ético e intelectual de una época que, después de ellos, ya no volvió a ser la misma en el territorio del arte”.

Los informalistas. Foto: Santiago Torralba.
No estamos ante una muestra solo para amantes del arte contemporáneo y moderno. No; el paseo por las dependencias del templo conquense es una invitación a todos los públicos; no dejará a nadie indiferente; es todo un descubrimiento para neófitos, un acicate para iniciados y una oportunidad única para los más avezados. Es, sin duda toda una experiencia para los sentidos, una de esas exposiciones que no dejan indiferentes y la excusa perfecta para visitar una ciudad cuyo callejeo siempre sorprende y agrada.

Los informalistas. Foto: Santiago Torralba.
La poética de la libertad permanecerá abierta hasta el 6 de noviembre en la Catedral de Cuenca. Toda la información en: www.poeticadelalibertad.com