“Desde las maquinaciones del sur a las salvajes tierras del este, pasando por el helado norte y el milenario Muro que protege el reino de las fuerzas tenebrosas, dos poderosas familias mantienen un enfrentamiento letal por gobernar los Siete Reinos de Poniente. Mientras la traición, la lujuria y las fuerzas sobrenaturales sacuden los pilares de los Reinos, la sangrienta batalla por el Trono de Hierro tendrá consecuencias imprevistas y trascendentales”.

Es, quizás lo hayan reconocido, la línea argumental en la que se basa Juego de Tronos, una de las series más populares de la reciente historia televisiva. La trama se nutre de intrigas cortesanas, escenas bélicas, batallas, reyes depuestos… Una trama que no está muy lejos de la situación convulsa y bélica que se vivía en la península Ibérica a finales del siglo XI. En aquella época, al-Ándalus se desintegraba en los reinos de taifas, que combatían entre sí movidos por su afán de poder. Por su parte, los reinos cristianos impulsaban poco a poco la reconquista hacia el sur. Fue esta situación la que se encontraron los almorávides que, con un poderoso y organizado ejército, llegaron desde el sur de África para reunificar el territorio musulmán y frenar el avance cristiano.

Con ese panorama, el 15 de agosto de 1097, tiene lugar la batalla de Consuegra. En esa localidad de la Mancha toledana, el poderoso ejército almorávide –llegado desde Córdoba y dispuesto a arrebatar Toledo a los cristianos- se enfrenta a las tropas de Alfonso VI apoyadas por 300 caballeros liderados por Diego Rodríguez, hijo del Cid Campeador.

Pese a la resistencia del bando cristiano, es finalmente el ejército almorávide el que se alza con la victoria, provocando la huida de las huestes de Afonso VI y del mismo monarca hacia el castillo de la Muela, situado en el consaburense cerro Calderico. Tras los muros de la fortaleza aguantan un asedio de ocho días hasta que las tropas musulmanas deciden retirarse. La derrota supone además la muerte en el campo de batalla de Diego Rodríguez, el único hijo varón del Cid.

Este acontecimiento, que forma parte de la milenaria historia del pueblo, es recordado cada año por todos los vecinos de la localidad que se vuelcan en la celebración de Consuegra Medieval, una espectacular recreación histórica de todo lo que sucedió aquel 15 de agosto de 1097. El completo programa, que este año se desarrolla los días 11, 12 y 13, tiene como platos fuertes:

El Fonsado Castellano

En el que se recrea la vida durante el asedio en el Castillo. Vivimos las horas previas a la batalla, somos testigo del entrenamiento de las tropas, de los intensos turnos de guardia y de las preocupaciones y decisiones que sus habitantes atraviesan de cara al previsible enfrentamiento. Acompañamos a un joven durante los rituales hasta ser nombrado caballero, nos colocamos en la sala donde Alfonso VI y sus hombres de confianza plantean la batalla y somos testigos de amores y miedos.

La Almofalla Almorávide.

Estamos en el campamento del ejército Almorávide. Descubrimos el porqué de la llegada de este pueblo guerrero a la península, somos testigo de la desesperada petición de ayuda de los reyes de las taifas a Yusuf Ibn Tasufin y de cómo esta se volvió en su contra al decidir Yusuf invadir al-Ándalus.

As-Satrany o el juego de los ejércitos.

Un espectáculo que une teatro, música y danza y que representa la Batalla de Consuegra sobre un tablero de ajedrez humano mientras la muerte, que no distingue amigos de enemigos, va retirando poco a poco piezas del tablero. Tras la batalla, los supervivientes lloran a sus muertos con una ceremonia fúnebre y la tradicional Danza de la Muerte.

Además de estos tres grandes espectáculos (para las que hay que sacar entrada, cuyo precio oscila entre los 6 y los 12 euros) la ciudad entera regresa a la Edad Media con mercadillos, pasacalles, desfiles, rieptos y ceremonias rituales por las calles y plazas del pueblo.

Las entradas para los espectáculos pueden adquirirse mediante venta online o, los días del evento, en los mostradores de información de la Oficina de Turismo de Consuegra.

Programa Consuegra Medieval.